Capitán Alonso Dávila y Rojas

Esta información ha sido copiada del libro de Roberto Picón Parra, Fundadores, Primeros Moradores y Familias Coloniales de Mérida (1558-1810), 4 Tomos (Caracas, Distrito Federal, Venezuela: Biblioteca de la Academia Nacional de la Historia. "Fuentes para la Historia Colonial de Venezuela", 1988), Tomo 4: 153-154.

Familia fundada en Mérida por Don Alonso Dávila y Rojas, natural de Ciudad Real donde fue bautizado el 20 de febrero de 1581, hijo legítimo de Don Luis Dávila y Doña Luisa de Rojas y Toledo, su tercera mujer, natural de la Puebla de Montalbán, nieto paterno de Don Luis Dávila y Doña María de Coca, vecinos de Ciudad Real, fundadores del Mayorazgo de esta familia en 1551. En los Títulos de las Encomiendas se dice que Don Alonso Dávila y Rojas era primo hermano del Ilustrísimo Señor Don Pedro Pacheco, del Consejo de Su Majestad, Presidente de Cruzada, Inquisidor Mayor de la Suprema Inquisición.

Don Alonso Dávila y Rojas pasó a Indias en 1599, con Don Antonio Beltrán de Guevara, Corregidor de Tunja, también natural de Ciudad Real en La Mancha, Reino de Toledo; fue Capitán de Caballos en Pamplona, y cuando el Licenciado Capitán Antonio Beltrán de Guevara fue nombrado Visitador General de los indios de Pamplona, Mérida y otras ciudades el 12 de mayo de 1601, Don Alonso Dávila y Rojas le acompañó en su Visita, y fue Comisionado Juez Poblador en Táriba, Guásimo y Capacho en los meses de septiembre y octubre de 1602. Pasaron luego a Mérida donde casó Alonso Dávila y Rojas a fines de 1602 con Doña Juana de Gaviria y Quesada, hija legítima de Pedro García de Gaviria, ya difunto, y María Ruiz de Quesada. El 2 de abril de 1603, ante Alonso Sánchez, Escribano Público y de Cabildo, Don Alonso Dávila y Rojas "confesó haber recibido para en cuenta y parte de pago de esta escritura de promisión de dote que a su favor se otorgó por Doña María de QUesada y Francisco de Gaviria, su suegra y cuñado... cuando se casó con Doña Juana de Gaviria, su mujer", las cosas que se refieren en la carta de pago "que montan dos mil y cuatrocientos pesos de oro de a 20 quilates, parte en cuenta y parte de pago de la promisión de dote... ", "y de esta cantidad dió por libre y quito a los susodichos y lo otorgó en forma de derecho estando en las casas de su morada en este dicho día, mes y año dicho, siendo testigos Juan García de la Parra, y Andrés Martín Calvillo y Pedro de Gaviria, vecinos de esta ciudad..."

En este mismo documento aparece Don Alonso Dávila y Rojas como Alcalde Ordinario de Mérida en 1603, y también este año como Teniente Corregidor y Justicia Mayor de Mérida, lo cual resulta un tanto extraño si tomamos en cuenta que el 1 de enero de 1603 fue electo el Cabildo y Regimiento de la ciudad así: Diegor Prieto Dávila, Teniente Corregidor y Justicia Mayor, Hernando Cerrada y Diego de la Peña, el viejo, Alcaldes Ordinarios; Antonio de Reinoso Valdés, Diego de la Peña, el mozo, Hernando Albarrán de la Torre, García Martín Buenavida y Alonso Pérez de Hinestrosa, Regidores; Alonso Sánchez, Escribano.

Vicente Dávila dice que en 1604 también fue D. Alonso Teniente Corregidor y Justicia Mayor de Mérida, y a nosotros nos consta que lo era en 1606.

Tuvo encomienda de indios caquetíos, jiraharas y timotes en Barinas por título fechado el 1 de julio de 1610, confirmado el 20 de abril de 1611, por Don Juan de Borja, y en nombre de su hijo Alonso Dávila Gaviria tomó posesión de la encomienda de Escagüey en Mucurubá que perteneció en segunda vida a su cuñado Francisco de Gaviria y Quesada, quien la abandonó, el 19 de unio de 1614. Don Alonso Dávila y Rojas murió intestado en 1622, ahogado en el río Mucujún. Su viuda Doña Juana de Gaviria testó en Mérida 30 años después el 22 de junio de 1652. (Doña Juana de Gaviria hizo Codicilo el 18 de agosto de 1656).