Nicolás de Ribera y Laredo, "El Viejo"

"Nicolás de Ribera y Laredo, apodado “El viejo”, nació en Torre Alháquime - Cádiz, junto a la gaditana villa de Olvera, alrededor del año 1492. Fueron sus padres el capitán Alonso de Ribera y Valdivieso, que primero fue alcalde de Torre Alháquime y posteriormente de Olvera y sus castillos hasta 1504, año en que murió, y la sevillana Beatriz de Laredo y Esquivel; sus abuelos paternos Perafán de Ribera y Enriquez, de la Casa de los Señores de Tarifa y de los Adelantados de Andalucía, y Teresa Pérez Valdivieso, ambos sevillanos de la collación de San Bartolomé; y los maternos Francisco de Laredo, mayordomo mayor de los Reyes Católicos, y Catalina de Esquivel.

Nicolás llegó al Nuevo Mundo aproximadamente en el año 1522 y radicándose en Panamá, se vinculó allí a Francisco Pizarro, Diego de Almagro y Hernando de Luque en momentos que planeaban el descubrimiento del Perú. Comulgando con el proyecto ayudó a los tres socios, colaborando especialmente en la construcción del “Santiaguillo”, navío que luego usó la expedición. A bordo de él, precisamente, Pizarro zarpó en 1524 llevando a Ribera como tesorero del rey. Cuando Pizarro llevó a sus hombres a la Isla del Gallo, fue donde Nicolás de Ribera se cubrió de gloria, pues fue uno de los Trece que se negaron a dejar a su capitán en momentos tan difíciles para el descubrimiento del Perú y aun cuando muchos soldados querían desertar. Las crónicas de Cieza, Herrera, Zárate, Garcilaso y Anello Oliva, han perennizado su gesto.

Luego de la captura de Atahualpa, en la que no participó Ribera pues se encontraba cumpliendo órdenes de Pizarro de reclutar soldados en Panamá para reforzar la conquista del Tahuantinsuyo, a su regreso a tierras peruleras, tornando al valle del Rímac, Nicolás de Ribera asistió a la fundación de la Ciudad de Los Reyes, siendo su primer alcalde. A Ribera, y al conquistador Diego de Agüero, Lima debe su trazo ajedrezado. Poco tiempo después de fundada Lima, Ribera el Viejo, unió esfuerzos junto a Pizarro para repeler el duro cerco que puso a la ciudad Titu Yupanqui. Además, en otros sucesos de aquella época, Nicolás de Ribera siempre tuvo un espíritu conciliador entre las disputas que surgieron entre Diego de Almagro y Francisco Pizarro por los límites de sus gobernaciones, actuando como mediador entre ambos conquistadores. Una cédula expedida en Talavera de la Reina, el 6 de julio de 1541, le había confirmado su calidad de Caballero de Espuela Dorada. Por lo demás, todos sabían que su casa era la Casa de los Adelantados de Andalucía.

Ribera el Viejo, fue elegido nuevamente alcalde de La Ciudad de los Reyes, en el año 1544, coincidiendo con el alzamiento de Gonzalo Pizarro el mismo año. Para el año 1546, es elegido alcalde por tercera vez. No solo le decían “el Viejo” por ser mayor que su homónimo el regidor Nicolás de Ribera, el Mozo. A él lo nombraron el Viejo porque las penurias de su larga vida de guerrero lo habían convertido en un anciano de verdad.

Pero la salud de Nicolás de Ribera estaba quebrantada, y sintiéndose próximo a morir, fundó el 13 de mayo de 1556, el Hospital de Naturales de Ica. El 16 de octubre de 1556, el virrey Andrés Hurtado de Mendoza (marqués de Cañete), lo invistió con el cargo de Regidor del Cabildo de Lima, institución donde había sido procurador y mayordomo mayor en ocasiones anteriores. Aún tuvo fuerzas para asistir en calidad de Alférez del Ayuntamiento a la jura de Felipe II, el 25 de julio de 1557, pero luego se retira de la vida pública para prepararse a morir en el interior de su casa, frente al convento de Santo Domingo.

El conquistador Nicolás de Ribera el Viejo, Trece del Gallo, fundador de Pachacámac y Sangallán, primer alcalde de Lima y Caballero de Espuela Dorada, falleció en Lima entre enero y febrero de 1563. Se le sepultó en la Catedral de Lima, allí reposan sus restos y los de su esposa, en la Capilla de Santa Ana, esta capilla fue también sepulcro de sus hijos y algunos de sus descendientes.

La Capilla de Santa Ana donde descansan los restos de Nicolás de Ribera el Viejo, es parte del recorrido turístico que ofrece la Catedral de Lima, y puede ser visitada por turistas locales y extranjeros." (1)

Bibliografía: "Los Trece de la Fama, fundadores de ciudades en el Perú" escrito por el historiador José Antonio del Busto". (1)

(1) Texto; Lima Española

https://es.wikipedia.org/wiki/Trece_de_la_Fama