Giorgio Maria Vittorio Macri

Llegó al puerto de Buenos Aires para "hacerse la América" el 6 de enero de 1949.

Había sido uno de los creadores del Frente del Hombre Común (Frente del Uomo Qualunque, FUQ), partido que consiguió 30 bancas parlamentarias y el 5% de los votos en las elecciones constituyentes italianas de 1946.

Crítico del Comité de Liberación -especie de administración post Mussolini-, el FUQ tuvo durante un tiempo el apoyo de la poderosa Cofindustria -agrupación de la empresa peninsular- y propugnaba bajar los impuestos y un gobierno que interviniera lo mínimo. Pero entre el recuerdo de la prosperidad de los días del Estado interventor fascista y la decisión de los Aliados de industrializar y modernizar a Italia para evitar que el comunismo se hiciera más popular, las ideas del ingeniero Giorgio no prosperaron.

Separado, el también escritor y empresario se vino a Argentina, y trajo a sus tres hijos: Franco, Tonino y María Pía. Fue el primero de ellos quien debió dejar sus estudios de Ingeniería -eran años de vacas flacas familiares- para trabajar en la empresa Sadop (Sociedad Anónima de Obras Públicas). Y lo que aprendió allí fue fundamental cuando, poco después, fundó Demaco, constructora desde la cual levantó un imperio industrial.

Franco se casó con la argentina Alicia Blanco Villegas y tuvo cuatro hijos. El menor de ellos, Mauricio, nació en febrero de 1959. Siempre navegando en las turbulentas aguas de la economía y la política argentinas, Franco Macri coqueteó y negoció con todos los gobiernos. En 1989, por ejemplo, además de financiar en parte la campaña de Carlos Menem, puso todos los autos FIAT (en ese momento la FIAT de Argentina estaba bajo el control de los Macri) para las actividades del político.

La devolución, según el economista y crítico de los Macri, Sergio Lozano, fue generosa: "Macri (padre) colocó en la subsecretaría de Planeamiento a Horacio Escofet; en la de Concesiones al director de Sideco Americana, Carlos Manuel Ramallo; en la subsecretaría Legal y Técnica de la presidencia a Osvaldo Pérez Cortés. En la comisión vial del Ministerio, además de Escofet y Ramallo, los Macri ubicaron a su apoderado Guillermo Fanelli Evans y a Roberto Righini".

Todos ellos eran hombres de confianza del Grupo Macri, que entraron al gobierno argentino en tiempos de Carlos Menem.

Mientras, Mauricio ya era ejecutivo, con posgrado en Columbia, y se había casado en la exclusiva iglesia de Pilar con Yvonne Bordeu. Separado en 1995 y con nuevas nupcias con la ex modelo Isabel Menditeguy (vuelto a separar en 2005), tuvo tres hijos con su primera esposa: Jimena (23), Agustina (19) y Francisco (18).

Se dice que a todos les gusta tocar la batería. Y casi por obligación deben simpatizar con el club deportivo Boca Juniors, del cual Mauricio Macri es presidente desde hace 11 años. Cuando ganó la primera vuelta de las elecciones, Macri mostró el mensaje de texto enviado por su hijo Francisco: "Capo, hoy me hiciste emocionar, juro que hasta firmaría un papel para que vos ganés, aunque no ganemos la copa (Libertadores); eso me mató".

Pero existe otra Macri "famosa". Florencia, medio hermana menor de Mauricio, hija de un segundo matrimonio de su padre. Secuestrada durante seis días en 2003 -cuando estudiaba cine- y liberada tras el pago de US$ 750 mil, provocó escándalo en enero de 2006 cuando salió con Nicolás Alejandro Barlaro, un ex convicto acusado de encubrir el secuestro del joven Ariel Strajman, a quien le cortaron el dedo meñique con una tenaza.

Ex modelo de la marca de ropa A.Y. Not dead, ex estudiante de circo y acrobacia, Florencia es ya una figura transgresora en la farándula local. Ha filmado videoclips de grupos rock como "Cuentos borgeanos" y amenaza con la tumba a los paparazzis que la persiguen. Una muestra más de que llevar el apellido Macri no es fácil.