Gutierrez Álvarez de Toledo, Señor de Alba de Tormes - Obispo

Gutierre Álvarez de Toledo (Alba de Tormes, *1376; Toledo †1446). Sacerdote y noble castellano. Obispo de Palencia (1426-1439), arzobispo de Sevilla (1439-1442) y arzobispo de Toledo (1442-1446).

Este personaje es uno de los eclesiásticos más activos en la política del siglo XV, con una larga carrera que incluye numerosos ascensos y caídas del entorno del poder. Ya durante el reinado de Enrique III de Castilla tuvo importantes participaciones y ambiciones políticas, que llegaron a costarle la prisión por orden de Enrique III al estar involucrado en el asesinato de Juan Serrano. Con la minoría de edad de Juan II de Castilla desaparece de la política, volviendo a aparecer en 1419, con su mayoría de edad, de la mano de los infantes de Aragón. Con el infante Enrique de Aragón colaborará en el gobierno que se formó tras el Golpe de Tordesillas, lo que supuso su alejamiento del poder una vez que el rey consiguió escapar de su primo. Desde ese momento se acerca poco a poco al servicio regio, con quien colaborará numerosas veces, anteponiendo siempre su propio interés. En el año 1429 obtuvo del rey Juan II de Castilla el señorío de su villa natal, Alba de Tormes, que posteriormente daría su nombre a la Casa de Alba. Este señorío comprendía las tierras de la villa de Alba de Tormes, localidad próxima a Salamanca. Gutierre cedió este señorío a su sobrino Fernando Álvarez de Toledo, a quien el propio rey Juan II concedió el título de conde de Alba de Tormes en 1438. Pese a ese acercamiento, de nuevo el prelado se distanciaría del rey, lo que, junto a los rumores de que conspiraba contra el rey y su privado Álvaro de Luna, le llevó nuevamente a prisión en 1431. Finalmente fue absuelto por el rey, pero estuvo retirado durante algunos años de la política. Volvería a finales de los años 30 del siglo XV, y su principal objetivo sería alcanzar la sede primada de Toledo, para lo que no dudaría en acercarse al rey o a los infantes de Aragón según fuese más conveniente. Finalmente, logró la sede primada en 1442, sede que ocupó hasta su muerte en 1446. Para alcanzar la sede no dudó en apoyarse en la potencia económica de su familia, origen de la casa de Alba.

Biografía

Este personaje es uno de los eclesiásticos más activos en la política del siglo XV, con una larga carrera que incluye numerosos ascensos y caídas del entorno del poder. Ya durante el reinado de Enrique III de Castilla tuvo importantes participaciones y ambiciones políticas, que llegaron a costarle la prisión por orden de Enrique III al estar involucrado en el asesinato de Juan Serrano. Con la minoría de edad de Juan II de Castilla desaparece de la política, volviendo a aparecer en 1419, con su mayoría de edad, de la mano de los infantes de Aragón. Con el infante Enrique de Aragón colaborará en el gobierno que se formó tras el Golpe de Tordesillas, lo que supuso su alejamiento del poder una vez que el rey consiguió escapar de su primo. Desde ese momento se acerca poco a poco al servicio regio, con quien colaborará numerosas veces, anteponiendo siempre su propio interés. En el año 1429 obtuvo del rey Juan II de Castilla el señorío de su villa natal, Alba de Tormes, que posteriormente daría su nombre a la Casa de Alba. Este señorío comprendía las tierras de la villa de Alba de Tormes, localidad próxima a Salamanca. Gutierre cedió este señorío a su sobrino Fernando Álvarez de Toledo, a quien el propio rey Juan II concedió el título de conde de Alba de Tormes en 1438.

Pese a ese acercamiento, de nuevo el prelado se distanciaría del rey, lo que, junto a los rumores de que conspiraba contra el rey y su privado Álvaro de Luna, le llevó nuevamente a prisión en 1431. Finalmente fue absuelto por el rey, pero estuvo retirado durante algunos años de la política. Volvería a finales de los años 30 del siglo XV, y su principal objetivo sería alcanzar la sede primada de Toledo, para lo que no dudaría en acercarse al rey o a los infantes de Aragón según fuese más conveniente. Finalmente, logró la sede primada en 1442, sede que ocupó hasta su muerte en 1446. Para alcanzar la sede no dudó en apoyarse en la potencia económica de su familia, origen de la casa de Alba.